domingo, 22 de mayo de 2011

Espantos Riosuceños

Las antiguas y aun nuevas calles Riosuceñas, cansadas de ver transitar la vida de los ciudadanos, perciben la presencia de almas en pena o espantos que se encuentran suspendidos en el umbral entre la vida y la muerte, por lo tanto se escuchan o algunas veces se ven en las noches pesadas por tiempos de semana santa o en noviembre considerado el mes de los difuntos.
Cuentan que una señora era muy dedicada a espiar las vidas ajenas hasta altas horas de la noche, cierto día estaba allí mirando por una hendija, cuando observo a la llamada niña de la primera comunión, esta es la aparición de una niña vestida de blanco, que parece murió en esta tierna edad, y aun no ha ingresado a la vida del descanso eterno, ella flota en el aire, entonces la señora vio pasar  a la niña fantasma  y en vez de entrarse a orarle, siguió allí, de pronto la niña se sitúa frente a ella en la hendija, esto ocurrió hace mucho tiempo en el viejo Riosucio, se cuenta que la señora entro en un pánico enfermo de los nervios y al poco tiempo falleció.
Se dice que este espanto se aparece por la cuadra que está situada  detrás de la iglesia de la Candelaria.
Siguiendo en las noches tenebrosas, cierto día por la calle del comercio, que une las plaza de San Sebastián  y la Candelaria, caía en las horas de la noche una tormenta magistral, de pronto a  altas horas de la noche se escucha terribles gritos de ultra tumba, era la llorona que bajaba por ahí, el ruido del agua, la falta de energía y el temor hicieron que muchos se acostaran temprano y otros a orar; cuentan que se oían las cadenas al rozar el pavimento, los perros ladraban  y hasta aullaban como si fuera el día final.
Esto ocurrió por allá en 1988 a finales del año, no estamos muy lejos de nuestros espantos cotidianos.
Por los lados de la zona de tolerancia o barrio Caldas, cuando aun no estaba pavimentado se oía la patasola, esta era una muchacha que desafiando a su madre se dedica a la prostitución, la madre le hecho una maldición, “Te he de ver andan dando en una pata” y en realidad sucedió esta tragedia, una noche de fiesta fue herida  por una bala en una de sus piernas, tan grave fue el caso
Que tuvieron que amputársela, la mujer murió poco después, pero quedo espantando en las noches, se oye el único pie, rastrillando sus pasos en las piedras de esa calle, causando terror r por doquier.
Aun muchos vecinos de la escuela Antonio Nariño observan en ciertas noches, un bulto blanco que se sitúa allí en ese callejón de la escuela que va a dar al patio no se sabe que ocurrió allí pero a veces estos sucesos no tienen una explicación racional.
En el municipio existen todavía la costumbre de  amenazas a los niños traviesos “si seguís molestando te llevara el viejo del costal con la mano peluda”. Este era en viejo muy feo y siniestro que echaba a los niños y a sus juguetes en costales y los desaparecía, los cogía con una mano peluda que tenia con garras allí incluidas. Este espanto  hacia que los niños al solo imaginárselo, comenzaran a portarse mejor.
 Aun existen casas donde sus dueños apegados a sus propiedades se han quedado, se escuchan sus pasos, se ven sombras, en fin muchos decían que los espantos existían porque no había luz eléctrica, cuando esta llego a Riosucio, muchos espantos se escondieron, pero ahora están más vivos que nunca observando a este mágico pueblo desde la dimensión de las sombras


3 comentarios:

  1. que entrada tan miedosa... :S
    riosucio tiene de todo, cuando pueda iré a conocer.

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  3. Hola gracias por la información, Fuente: https://riosuciocaldas.com/

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